En los años 90 había dos anuncios que estaban grabados en la memoria de todo espectador: el anuncio de Coca Cola en el que a las once y media un hombre se quitaba la camiseta mientras se bebía una y varias mujeres le observaban con pasión, y el anuncio del primo de Zumosol. El primo en cuestión tenía nombre y apellidos, Sergio Medialdea, por entonces modelo y el fuertote que defendía al niño indefenso de los malotes del colegio.. Seguir leyendo
Sergio Medialdea fue en los años 90 probablemente uno de los rostros más famosos de la televisión. Era el primo de Zumosol. Anoche regresó a la pequeña pantalla para relatar el infierno que sufrió por el acoso escolar
En los años 90 había dos anuncios que estaban grabados en la memoria de todo espectador: el anuncio de Coca Cola en el que a las once y media un hombre se quitaba la camiseta mientras se bebía una y varias mujeres le observaban con pasión, y el anuncio del primo de Zumosol. El primo en cuestión tenía nombre y apellidos, Sergio Medialdea, por entonces modelo y el fuertote que defendía al niño indefenso de los malotes del colegio.. Como muchos otros rostros de aquella época, cuando los spot fueron evolucionando, él desapareció. Más de 20 años después, Medialdea reapareció anoche en el programa 59 segundos para relatar precisamente lo que el anuncio que protagonizaba mostraba: el acoso escolar.. Eran otros tiempos y la sociedad no identificaba ese anuncio con lo que se identificaría hoy. Tampoco se le daba la importancia que se da hoy al acoso escolar. Sin embargo, la historia de Medialdea es sorprendente, pues él mismo fue un niño que sufrió acoso escolar.. El programa presentado por Gemma Nierga y que ahora se emite en La 2, abordó el grave problema del acoso escolar que se vive en las aulas con la actriz Vanesa Romero y con Sergio Medialdea. Ambos recordaron haber sido víctimas de acoso en su infancia.. Además, en plató estuvo José Manuel López, cuya hija Kira se suicidó con 15 años tras sufrir acoso escolar de forma reiterada. José Manuel dedica ahora su vida a combatir esta lacra y ha presentado en el Congreso de los Diputados más de 200.000 firmas para la tramitación de una ley integral contra el acoso escolar. Pero fue el testimonio de Medialdea el que más sorprendió a los espectadores, pues, aparte de su dureza, resultaba increíble que él, cuyo papel en aquel anuncio era el de defensor de un niño que sufría acoso, pasó en la vida real por ella hasta tal punto que «me puse delante de un tren».. «Lo sufrí desde los 14 a los 18 años y lo pasé realmente mal», relató el ex modelo. El programa mostró en la pantalla imágenes de Medialdea en aquella época. Fotografías en las que se veía a un chico atlético, fuerte, apuesto… «Por estar de esta guisa no merecía que se metieran conmigo, ni que me pegaran, ni que abusaran de mí. A veces los acosadores son tan crueles que durante tres años fui el óxido de hierro del instituto», contó.. ¿Por qué óxido de hierro? quiso saber Gemma Nierga. «Porque la fórmula química del óxido de hierro es FeO. Me esperaban a la salida, a la entrada del instituto. Me daban collejas, me escupían, me quitaban el bocadillo. El dinero que llevaba era para que para ellos compraran tabaco. Eran chicos de COU», recordó.. Tal fue el horror que sufrió que decidió aislarse del mundo, de todo su entorno y cayó en lo que muchos niños y adolescentes caen cuando sufren el acoso reiterado, en preguntarse si merecía la pena vivir: «Empiezas a pensar que el mundo sería un lugar mejor si no estuvieras tú. Eso es muy fuerte. Cuando empiezas a creer esas cosas, aparece la sombra del suicidio. Estuve andando por las vías del tren y me puse delante de uno. Cerré los ojos porque quería desaparecer».. Pero fue gracias al amor por sus padres lo que le hizo echar marcha atrás, según relató anoche. «Me vinieron a la cabeza las dos únicas personas que me querían tal y como era, mis padres. ¿Cómo iba a hacerles eso? Y me aparté de la vía. Recuerdo las caras de los pasajeros del tren, de ‘qué hace un chaval de 15 años andando por las vías'», recordó. Nunca en la vida le contó a sus padres ni a quel momento ni tampoco que sufría acoso: «Yo jamás se lo comenté a mis padres. Mi padre se enteró de que había sufrido bullying a los 88 años».. ante sus palabras, Vanesa Romero le mostró su apoyo y se identificó con él, pues ella también fue una niña acosada. «Mis padres tomaron medidas, me cambiaron de colegio y volví a sufrir acoso en el otro colegio», contó la actriz.. La razón por la que Vanessa Romero recibía el odio de sus compañeros era algo parecida a la de Medialdea, por ser una niña con buenas notas y guapa. «»Era una niña que estudiaba mucho, me gustaba ser la primera de la clase, se me daba bien el deporte. Destacaba, era rubita y con los ojos azules. Sentí que me empezaban a aislar».
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