Quince son los años que Almudena Ariza lleva como corresponsal en RTVE de una carrera que ya suma 45 años. Cubrió los atentados del 11-S, las guerras de Irak o Afganistán, los terremotos de turquía, Haití o Irán, ha viajado por Asia, África, América Latina… Por cubrir, hasta cubrió los sanfermines. Si hay un rostro de la televisión pública que vaya ligado a la palabra corresponsal ese es el de Almudena Ariza. La veterana periodista no entiende otra manera de hacer periodismo que estar en el lugar en el que ocurren las cosas y contarlo, y es lo que lleva haciendo tres lustros. Ahora lo hará desde Bogotá después de dos años como corresponsal en Jerusalén. . Seguir leyendo
Almudena Ariza es una de las trabajadoras de RTVE que más conoce el mundo que hay fuera de nuestras fronteras. Tras dos años como corresponsal de Jerusalén inicia un nuevo rumbo a Bogotá. Llegaba el momento de la despedida y Almudena Ariza ha hecho gala de la importancia de su trabajo
Quince son los años que Almudena Ariza lleva como corresponsal en RTVE de una carrera que ya suma 45 años. Cubrió los atentados del 11-S, las guerras de Irak o Afganistán, los terremotos de turquía, Haití o Irán, ha viajado por Asia, África, América Latina… Por cubrir, hasta cubrió los sanfermines. Si hay un rostro de la televisión pública que vaya ligado a la palabra corresponsal ese es el de Almudena Ariza. La veterana periodista no entiende otra manera de hacer periodismo que estar en el lugar en el que ocurren las cosas y contarlo, y es lo que lleva haciendo tres lustros. Ahora lo hará desde Bogotá después de dos años como corresponsal en Jerusalén.. Las corresponsalías de RTVE cambian para la próxima temporada. Almudena Ariza irá a Colombia, Beatriz Viaño, quien cubría la corresponsalía de Colombia, vuelve a España, cómo ha vuelto Belén Lorente, la que fuera corresponsal en Portugal. Cristina Oléa continuará en Washington y Diego Arizpeleta, en Londres; Usoa Zubiria, la que fuera la corresponsal de Jerusalén antes de la llegada de Almudena Ariza, estará en agosto en Jerusalén, mientras que a RTVE le falta asignar Nueva York y Portugal.. Cambios que los espectadores empezarán a notar a partir de septiembre. Llega, por tanto, el momento de las despedidas y de los adiós a los lugares que han sido el hogar de estos periodistas durante varios años. La primera ha sido Almudena Ariza. No es para menos, pues si ha habido una corresponsalía complicada durante estos dos años ha sido la de Jerusalén, donde ha cubierto la guerra en Gaza. Pero no sólo la guerra.. Almudena Ariza ha vivido en primera persona los ataques del 7 de octubre, la respuesta de Israel, la muerte de miles de niños en Gaza por los ataques del Ejército israelí, por la hambruna que está sufriendo el pueblo palestino. En cada conexión (y a través de sus redes sociales) Almudena Ariza ha mostrado siempre cada vértice de esta guerra.. Ya de regreso a España, han sido sus compañeros de RTVE los que han querido darle la bienvenida, momento que la periodista ha aprovechado para despedirse de su corresponsalía en Jerusalén con un claro y brutal mensaje, que deja sin un ápice de dudas lo que han sido estos dos años para la periodista y lo que deja allí.. «Termina mi etapa como corresponsal en Jerusalén, después de casi dos años intensos cubriendo Oriente Medio. Han sido meses de trabajo profundo, de historias duras, complejas y necesarias», arrancaba la periodista.. Almudena Ariza continuaba hablando de su nuevo destino, «en Bogotá, donde cubriré Colombia, Venezuela, Perú, Ecuador y Panamá. Aterrizo con ilusión… y con un recibimiento lleno de cariño por parte de mis compañeros: tarta, globos y sonrisas». Pero, advierte, «no me desconecto de Gaza».. «Allí siguen muriendo, no solo bajo las bombas, sino de hambre. Es atroz. Inhumano. Y ocurre ante los ojos del mundo. Desde aquí seguiré denunciándolo, compartiendo los vídeos y testimonios que me llegan. Porque informar también es resistir», sentencia la periodista, premio internacional de Periodismo Cátedra Manu Leguineche.. «En septiembre estreno, además, un pódcast sobre Gaza que aportará contexto y perspectiva, pero también mostrará lo esencial: esa franja donde conviven el exterminio sistemático y la entrega de quienes se juegan la vida por ayudar. Seguiré contando. Gracias por estar ahí y por no dejar de escuchar y de leerme», termina.. Si algo caracteriza a Almudena Ariza es que no es de las que se esconden en ninguna trinchera. Habla alto y claro, al igual que durante sus 45 años de carrera, en sus diferentes puestos fuera y dentro de RTVE, ha hecho. Su despedida de la corresponsalía de Jerusalén de haber sido distinta no hubiera sido la de Almudena Ariza.. Los Informativos de RTVE tiene un elenco de corresponsales de los más valorados en la televisión y en la profesión. Entre ellos se encuentra Almudena Ariza. Cada día, Almudena Ariza ha relatado el horror que se vive en Gaza, los ataques en ambos lados, la situación en Israel en una de las corresponsalías más complicadas, pues ha sido difícil no encontrar un día en el que Almudena Ariza no tuviera que enfrentarse a interrupciones durante sus directos o a complicaciones que han hecho muy complicado su trabajo. No sólo en Jerusalén sino también en España, donde ha sido muchas veces criticada por los que considera que es imparcial en cuanto al conflicto.. Durante estos dos años, nunca ha dejado de contestar a las críticas defendiendo su profesionalidad y su trabajo. Una de las últimas fue cuando el periodista catalán, ex jefe de prensa de Artur Mas y estrecho colaborador de Puigdemont, Joan María Piqué, publicó en redes sociales una nota en la que no sólo criticaba la «imparcialidad» de Almudena Ariza, sino que además solicitaba a la dirección de RTVE su destitución al considerar que «sus discursos son activistas».. Todo comenzó cuando Almudena Ariza publicó un hilo contextualizando el origen del conflicto. En uno de los mensajes, la periodista aseguraba que «el plan de partición de la ONU era profundamente injusto y fue impuesto sin acuerdo con los palestinos, que tenían mayoría demográfica y poseían la mayor parte de la tierra. Su rechazo no ‘justifica’ ninguna limpieza étnica posterior. Decir que ‘Palestina quiere morir matando’ es una frase deshumanizadora que ignora décadas de ocupación, colonización, bloqueo y represión».. Piqué, entonces, publicaba, también en redes, un mensaje en el que ponía en duda la profesionalidad de la periodista: «Almudena: con este relato, ¿cómo pretendes que alguien crea que nada de lo que dices es mínimamente ecuánime? No dudo de tu honestidad, pero además debes aparentarla, como la mujer del César. Se te envía allá y se te paga con fondos públicos para que expliques la verdad, no tus discursos de activista».. Ante estas palabras, Almudena Ariza no dudó en responder y en defender su trabajo por el que ha sido alabada en muchos sectores y ámbitos: «Yo no puedo ser neutral ante la masacre de civiles. Ningún periodista honesto debería serlo. Eso no es activismo, es ética profesional.Informar sobre crímenes y sufrimiento civil es una obligación, no una opción. Y eso es precisamente lo que debe hacer un periodista de servicio público».. «Yo, voy a seguir haciendo mi trabajo: informar con rigor sobre los crímenes de guerra en Gaza y las violaciones de derechos humanos», sentenció la periodista. Su despedida de Jerusalén ha sido otro claro mensaje.
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