Cuando Ana Rosa Quintana pasó a la tarde y a su TardeAR muchas cosas iba a echar de menos de sus mañanas. Una, la actualidad y la adrenalina que genera la información mañanera y, otra, el poder opinar libremente. Es decir, sus editoriales con las que arrancaba cada mañana El Programa de Ana Rosa. El otro día en la rueda de prensa por su regreso a las mañanas de Telecinco, era ella misma la que aseguraba que durante estos meses se ha tenido que morder mucho la lengua. Demasiados meses y demasiados silencios que se han ido acumulando en una mochila a la que había que empezar a descargar. ¡Y vaya si ha descargado!. Seguir leyendo
Ana Rosa Quintana llevaba demasiados meses mordiéndose la lengua. En la tarde, lo de las editoriales, no entraba dentro del pack. Pocas veces en su TardeAR, la presentadora ha tenido la oportunidad de dar guantazos como panes. Hoy, en su regreso a las mañanas, ha soltado lo más grande, pero todavía le queda mucho más
Cuando Ana Rosa Quintana pasó a la tarde y a su TardeAR muchas cosas iba a echar de menos de sus mañanas. Una, la actualidad y la adrenalina que genera la información mañanera y, otra, el poder opinar libremente. Es decir, sus editoriales con las que arrancaba cada mañana El Programa de Ana Rosa. El otro día en la rueda de prensa por su regreso a las mañanas de Telecinco, era ella misma la que aseguraba que durante estos meses se ha tenido que morder mucho la lengua. Demasiados meses y demasiados silencios que se han ido acumulando en una mochila a la que había que empezar a descargar. ¡Y vaya si ha descargado!. Ana Rosa Quintana ha vuelto a las mañanas como cuando lo dejó, con sus editoriales. El Programa de Ana Rosa ha arrancado con la presentadora vestida de blanco -es una tradición cada vez que arranca programa o temporada-, en el centro de su nuevo plató y con la editorial más que preparada. De hecho, el jueves de la semana pasada ya anunció que la tenía escrita, pero que no iba a revelar nada. Unas editoriales, que quede claro, no son la línea editorial del programa, sino que salen únicamente de ella, que se las prepara todas las tardes/noches antes de irse a la cama, por aquello de irse a dormir sin que nada te quite el sueño.. ¿Y quién ha sido el protagonista de la primera editorial del regreso de El Programa de Ana Rosa? Pues, efectivamente, Pedro Sánchez. Lo que durante estos meses se ha tenido que callar, pues en TardeAR no había opinión, lo ha soltado esta mañana en un duro editorial, donde Sánchez no ha salido vivo. Bueno, sí, porque, tal y como ha asegurado Ana Rosa Quintana, el presidente del Gobierno es como «un tentetieso», siempre que se le golpea vuelve a levantarse, «aunque mira a otro lugar». Y detrás, para ser más mordaz y más demoledora, la imagen de Pedro Sánchez, efectivamente, como un tentempié, «el tentetieso».. Llegó Ana Rosa Quintana con las pistolas bien cargadas y con una diana clara: Pedro Sánchez y «las piedras» que hacen que ese tentempié se mantenga en pie por muchos golpes que se les dé. Y han sido esas piedras las que ha ido Ana Rosa Quintana numerando de una en una en una editorial mordaz, letal, sin piedad.. «Buenos días y bienvenidos a la temporada número 20 de El programa de Ana Rosa, y gracias por seguir ahí, para nosotros es una cuestión de confianza. Precisamente Pedro Sánchez se tiene que someter a una cuestión de confianza antes de mes y medio. Es el plazo que le da Puigdemont para ganarse su confianza ciega, para convertir el Parlamento en El Congreso de las Tentaciones», arrancó la presentadora mirando fijamente a cámara.. Ana Rosa Quintana tiene muy claro cuál es su trabajo como comunicadora: «exponer a quien Gobierna». «Y ahora el Gobierno es el que es», aseguraba el otro día en la presentación del nuevo Programa de Ana Rosa. Exponer es visibilizar y fiscalizar al que gobierna y, ahora, el que gobierna es Pedro Sánchez, y no se encuentra en una situación fácil, pues dependen de un fugado, de un política cuyo objetivo es separarse de España, pero para ello necesita al Gobierno de España o, como ha advertido esta mañana Ana Rosa Quintana, el Gobierno le necesita más él.. «Sánchez tendrá que ver ante sus ojos cómo sus socios de legislatura se alían entre ellos y le son infieles con otras formaciones. Pero no verán a Sánchez llorar ante las cámaras, porque una vez más se convertirá en un tentetieso, ese juguete que siempre se tambalea pero que nunca se llega a caer. Da igual de dónde le llegue el golpe, porque siempre se pone de pie, aunque al levantarse no tiene por qué mirar al mismo sitio. Gracias al lastre que lleva debajo, siempre se queda en pie», ha sentenciado Ana Rosa Quintana en su editorial.. Una editorial que ha sido más que dura, más que letal, más que firme. Ana Rosa Quintana tenía ganas y no lo ocultó. Como ha dicho muchas veces, «después de 40 años en esta profesión me he ganado el derecho a opinar lo que me dé la gana».. Y los golpes han ido caído de uno en uno, las «piedras» que mantienen en pie a Pedro Sánchez, según Ana Rosa Quintana: «Uno: el Fiscal General del Estado imputado negándose a declarar ante el juez ha sido como ver a un árbitro metiendo un gol para ganar una apuesta. La excusa que ponen por las filtraciones de datos reservados es que 60 personas accedían a los correos de la fiscalía, incluso señalan a la señora de la limpieza como responsable de dejar como la patena el correo del fiscal. Les cambian de móvil cada seis meses por seguridad, pero ponen la contraseña de la fiscalía en el corchopán de la cafetería. Cuestión de confianza».. «Segundo golpe al presidente tentetieso: la imputación a tres personas de su máxima confianza: su exmano derecha, José Luis Ábalos, envuelto en una trama de corrupción digna de Torrente, su mujer, por tráfico de influencias y su hermano por, entre otras cosas, crearle un puesto de trabajo para no ir a trabajar. El sueño de cualquier Nini. Ya lo decía Fofito: No hay nada como la familia unida. Cuestión de confianza».. …Y los golpes de Ana Rosa Quintana seguían cayendo: «Golpe número tres al tentetieso. Sánchez presenta un decreto ómnibus que finalmente se convierte en un decreto microbús porque Puigdemont quiere dejar fuera los dineros. Quiere negociar de tú a tú con el Gobierno. Cuestión de confianza. La España plural consiste pactar una financiación singular».. Pero si alguien pensaba que Ana Rosa Quintana sólo iba a enumerar con ironía las encrucijadas en las que se encuentra Pedro Sánchez para mantenerse en pie, es que no conoce a Ana Rosa Quintana. «Sánchez en quien más confía en sí mismo, y por eso se ha convertido en el Iñaki Perurena de la negociación. Va a levantar pesadas piedras para buscar votos. Y si para que siga de pie el tentetieso tiene que conceder una Amnistía, unos indultos, reformar el Código Penal, o conceder una fiscalidad singular, lo hará», sentenció la presentadora.. Porque para Ana Rosa Quintana, «no son votos debajo de las piedras, son votos que pesan como piedras. El truco del tentetieso es el peso. El peso no le permite caerse, pero no va a ningún lado, nunca avanza. Gira y gira, pero siempre se queda en el mismo sitio».. Y no hay editorial sin que haya un golpe final. Y el de Ana Rosa Quintana esta mañana ha sido un golpe con las dos manos, pero no va a ser el único. Eso que quede claro: «Si queremos dar la vuelta a un tentetieso no debemos golpearle, la única manera de desactivarlo es quitarle el peso que tiene dentro. Sánchez se ha convertido en ese dentista donde un cliente llamado Puigdemont le agarra y le dice: ¿No nos haremos daño, verdad? Cuestión de confianza. Porque como piensa Puigdemont, donde hay confianza… rasco».. La Ana Rosa Quintana más letal, más mortífera ha vuelto. Porque el que avisa no es traidor.
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