Para escribir todo lo que ha ocurrido en esta temporada televisiva, que anoche se cerró, necesitaríamos varios volúmenes. ¿Dónde queda ya aquel mes de septiembre en el que Pablo Motos y David Broncano ocupaban titulares por doquier? ¿Dónde queda la berrea, las acusaciones de ‘robos’, las estrictas y peculiares mediciones de audiencia? ¿Dónde quedan los constantes cambios de programación, la esquizofrenía de la parrilla? ¿Dónde queda el esperar a más allá de las once de la noche para poder ver MasterChef, Futuro imperfecto, una serie o una película? Muchas son las lecciones que nos deja esta temporada televisiva. La primera de ellas es que la televisión es mucho más que televisión.. Seguir leyendo
Hacía mucho tiempo que una temporada televisiva no agitaba tanto el avispero. La tele siempre da noticias, pero esta temporada ha sido un no parar. Duelos en el access prime time, en la tarde, en la mañana. Recias luchas por aumentar la audiencia, mantenerse o no hundirse. ¿Qué hemos aprendido?
Para escribir todo lo que ha ocurrido en esta temporada televisiva, que anoche se cerró, necesitaríamos varios volúmenes. ¿Dónde queda ya aquel mes de septiembre en el que Pablo Motos y David Broncano ocupaban titulares por doquier? ¿Dónde queda la berrea, las acusaciones de ‘robos’, las estrictas y peculiares mediciones de audiencia? ¿Dónde quedan los constantes cambios de programación, la esquizofrenía de la parrilla? ¿Dónde queda el esperar a más allá de las once de la noche para poder ver MasterChef, Futuro imperfecto, una serie o una película? Muchas son las lecciones que nos deja esta temporada televisiva. La primera de ellas es que la televisión es mucho más que televisión.. Las cadenas cierran la que probablemente ha sido la temporada más convulsa de la televisión de la última década sin demasiados cambios en cuanto a audiencias se refiere. Antena 3 vuelve a ser la cadena líder, una corona que lleva sosteniendo sobre su cabeza ya cuatro años, aunque en esta ocasión con la mayor distancia histórica con Telecinco. Mientras la primera cadena de Atresmedia -también cierra como grupo audiovisual líder- ha logrado un 12,7%, Telecinco se ha quedado en un 9,7% y La 1 en un 10,3%, su mejor dato de los últimos siete años. En los últimos seis meses, con la llegada de la nueva dirección de RTVE, la cadena pública está viviendo un revulsivo en audiencias gracias a nuevos formatos, nuevas productoras y el empuje de los eventos deportivos y de entretenimiento.. Según los datos de Barlovento Comunicación y Dos 30′, Antena 3 ha liderado todos los meses de la temporada, con máximo. Ha sido el 85% de los días la cadena más vista;el 84% con la emisión más vista; el 90% de los minutos de oro; y ha liderado en las franjas de mayor consumo: el access prime time y el prime time. Tiene los programas de entretenimiento más vistos, el concurso más visto, la serie más vista y los informativos más vistos.. «No somos conformistas», explica José Antonio Antón, director general de Atresmedia. «Ser líderes es una gran responsabilidad no sólo por llegar a un gran número de personas cada día (por nuestros canales pasan diariamente unos 20 millones de personas), sino también porque ese liderazgo implica una relevancia y una influencia», sentencia.. La explicación, aunque sencilla es la de un esfuerzo difícil de ver, pero que existe día tras día en cada cadena y cada cadena con su propio objetivo. Antena 3 cuenta con tres motores fundamantales: los Informativos, Pasapalabra y El Hormiguero. Las tres emisiones son líderes con cuotas de pantalla que para el resto de cadenas son una utopía.. «Cerrar un curso más con un liderazgo tan sólido, con distancias tan amplias y en todas las franjas y géneros solo es gracias al talento, experiencia y dedicación de los profesionales de Atresmedia», asegura con orgullo Antón.. Antena 3 Noticias (18,6% de share) suma siete temporadas con los informativos líderes.Todas sus ediciones lideran y encadenan las mayores rachas históricas de liderazgo. Pasapalabra es un caso aparte. No sólo es el concurso más visto de la televisión sino que en esta temporada ha marcado récords históricos. Y El Hormiguero, qué se puede decir de El Hormiguero… El programa de Pablo Motos es el claro ejemplo de las palabras de Antón, no se conforma.. Su décimo novena temporada ha sido sin lugar a dudas la más complicada. Por primera vez se encontraba frente a frente con un hueso duro de roer, La Revuelta y David Broncano. De aquel inicio de temporada en el que las audiencias se medían en modo foto finish, El Hormiguero ha terminado la temporada de nuevo como el programa más visto de la televisión, y ya van 11 años de liderazgo consecutivo. Un hito histórico en la franja de mayor consumo y de mayor competencia de toda la televisión, lo que demuestra la fortaleza de este formato año tras año.. El programa de Pablo Motos ha liderado en el 70% de las ocasiones de esta temporada. Un dato que asciende al 85% si hablamos de 2025. De hecho, El Hormiguero finaliza el curso con una media de un 15,3% de cuota de pantalla, logrando ser el programa más visto del día hasta en 90 ocasiones en este curso. Sumado a las grandes audiencias que El Hormiguero logra cada día, el espacio ha obtenido sensacionales cifras en algunas de sus emisiones de esta temporada, como con la visita de Lamine Yamal (23,3% de share y 3,1 millones de espectadores de media), la entrevista a Victoria de Marichalar (23% y 2,9 millones), Arturo Pérez-Reverte (19,2% y 2,7 millones), la visita de Mariano Rajoy (18,7% y 2,5 millones) o Carolina Marín (22,3% y 2,5 millones). ¿Cómo lo ha vuelto a lograr? Porque El Hormiguero tuvo clara una cosa desde el principio; no nos vamos a conformar, no vamos a creer que por haber sido líderes 10 años, vamos a serlo siempre; vamos a librar la batalla y vamos a buscar cómo ganarla.. La batalla no ha sido otra que la que ha librado esta temporada con La Revuelta. Una cruenta batalla que vive su alto fuego desde hace varios meses tras la intervención de Alejandro Sanz para sellar la paz y tras comprobarse que ganar a El Hormiguero es prácticamente un milagro.. Mientras que El Hormiguero se ha mantenido cada mes de esta temporada, el regreso de las vacaciones de Navidad fue un punto de inflexión para La Revuelta. De marcharse en diciembre en un 15% de cuota de pantalla de media y a sólo dos décimas de El Hormiguero, a partir de enero el programa de David Broncano comenzó su desescalada: un 14,5% en enero, un 13,2% en febrero, un 12,7% en marzo, un 11,5% en abril, un 11,3% en mayo y un 11,1% en junio.. El elenco de La familia de la tele.MEDIASET. Si comparamos ambos programas durante toda la temporada, El Hormiguero cierra con un 15% de cuota de pantalla mientras que La Revuelta se queda en un 14,3%. Si hacemos la comparación desde enero a junio la distancia es aún mayor: El Hormiguero marca un 15% de share mientras que La Revuelta logra un 12,8%. Ya lo advirtieron los expertos en audiencias a este periódico al inicio de temporada: «El Hormiguero se mantendrá, mientras que La Revuelta se estabilizará en cuotas del entre 11% y 12%». Pasó e bum y todo volvió a la normalidad.. Pero si para Antena 3 ha sido una temporada qu cierra con broche de oro, a las otras cadenas también les toca hacer balance. Con una RTVE que ha vivido una temporada más que encendida con nueva presidencia, nueva dirección y nuevas apuestas, su balance de temporada se puede considerar un éxito al situarse segunda cadena en el ránking con un 10,3% de cuota de pantalla.. Es uno de sus mejores datos, cuatro décimas por encima de la temporada anterior, la cual cerró con un 10%. Sin embargo, sigue a una inalcanzable distancia de Antena 3 de más de dos puntos, pese a su temporada repleta de estrenos (cerca de 20) y de eventos deportivos (final de la Champions, Copa del Rey, la UEFA Nations League), a los cuales el resto de cadenas ni siquiera optan por el alto coste que suponen. De hecho, sin los eventos deportivos, La 1 hubiera cerrado en un 10%, y sin los eventos no deportivos, como es Eurovisión, La 1 hubiera cerrado la temporada en un 9,9% de cuota de pantalla.. La nueva RTVE ha tenido importantes aciertos como son The Floor o Futuro imperfecto, líderes en sus noches en prime time; y también éxitos al realizar determinados cambios en los contenidos como ha ocurrido con Mañaneros 360 o con la llegada de Jesús Cintora con Malas lenguas. Sin embargo, también ha vivido sonados fracasos como el de La familia de la tele que durante varias semanas puso entre la espada y la pared a la dirección de RTVE al hundir la franja de tarde; o algunas series como Weiss y Morales, que no superó el 7,5% de audiencia.. Con todo, La 1 ha demostrado que ahora las audiencias son una de las claves de su desarrollo. Ahora La 1 pelea contra las cadenas privadas como hacía años que no ocurría. Cambia parrillas, programaciones, contenidos, programas en busca de la fórmula secreta que les lleve al liderazgo. Estrategias que han provocado fuertes críticas por parte de la audiencia y también dentro de la casa, pero que también ha llevado a la televisión pública a marcar datos de audiencia que no se registraban desde hacía décadas. Por ejemplo, La 1 cierra junio en un 10,8%, su mejor junio en 13 años y La 2 (3,2%), el mejor en 16 años.. Todos esos movimientos han salido bien, pues por primera vez en 23 años, Telecinco cae a la tercera posición en el ranking de cadenas en el cierre de una temporada. Pese al bestial éxito de La isla de las tentaciones y de Supervivientes 2025, al regreso de Ana Rosa Quintana a las mañanas o al subidón de El diario de Jorge tras el cambio de horario y de estilo, la principal cadena de Mediaset cierra esta temporada en un 9,7% de cuota de pantalla, medio punto por debajo de lo logrado la temporada anterior.. Conscientes de que todavía queda mucho camino por andar, en Mediaset tienen claro que pese a la crisis de audencia que están viviendo, hay que seguir buscando los programas que devuelvan la gloria de hace unos años. Lo encontraron con La isla de las tentaciones y con Supervivientes, pero le faltan esos motores que hacen que una cadena llegue y mantenga el liderazgo.. Ana Rosa Quintana, en su regreso a las mañanas de Telecinco.MEDIASET. La lección que deja esta temporada televisiva es, sin duda, que la televisión sigue más viva que nunca. Si no lo estuviera no se habrían vivido batallas tan cruentas como la de El Hormiguero y La Revuelta, ni la cancelación de un programa hubiera provocado tantos titulares, ni las direcciones estarían tan pendientes de las audiencias y de visibilizar sus éxitos. La temporada 2024/2025 ha supuesto un punto de inflexión para todas ellas. Para Antena 3 por seguir el camino y mantenerse en un liderazgo que a día de hoy parece inalcanzable; para La 1, el adaptarse a la nueva dirección y a la evolución de la audiencia y del público; y para Telecinco el de no decaer y el seguir en busca de su Dorado.
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