Jordi Pujol jamás habría confesado la existencia de una fortuna familiar oculta en un paraíso fiscal de no ser por la ‘Operación Cataluña’, armada desde el gobierno español, y por la inocultable corrupción familiar, en especial de su hijo Jordi. Esta es la tesis implícita en la película Parenostre, el filme de Manuel Huerga con guion de Toni Soler, sobre el episodio en el que el ex presidente catalán destrozó su balance de 23 años de gobierno y su imagen de estadista.. Las ficciones narrativas no tienen las mismas obligaciones que los documentales periodísticos o históricos. Es amplio el campo para las licencias que se toma el guionista, algunas muy propias de quien ha dirigido el programa televisivo de humor político de más éxito en Cataluña y otras de su militancia independentista. Es inocultable su propósito redentor de la figura política de Pujol, presentado como víctima de la codicia de sus hijos y de su esposa y a la vez “del Estado enemigo”, el todopoderoso y cruel Leviatán con el que el independentismo tuvo la insensata osadía de enfrentarse.. Con todos los focos sobre aquellos días iniciales del procès, la ficción fílmica echa a andar con un punto excesivo de mitografía, notable falta de contexto histórico y un aliento insuficiente si se trataba de convertir la caída del patriarca catalanista en una narración de valor universal. La extraordinaria interpretación del matrimonio Pujol a cargo de Josep Maria Pou y Carme Sansa no basta para salvar la película y hacerla atractiva más allá de las generaciones mayores, que han podido seguir intensamente toda la peripecia pujolista.. Dos tensas conversaciones ficticias, una entre Pujol y el rey ya emérito Juan Carlos, y otra entre Josep Pujol Ferrusola y el comisario Villarejo, establecen la vinculación entre el descubrimiento del escándalo y la consulta sobre la independencia, mientras que otro diálogo también ficticio, entre el ex presidente y el rector de Gósol, Josep Maria Ballarín, expone la tragedia moral que atormenta al anciano ex presidente, imbuido de sentido de culpa por su escasa vigilancia como padre sobre las actividades de sus hijos.. Esta conversación se presenta como una confesión auténtica, con absolución incluida a cargo del cura, e implícitamente del guionista, previa exploración del dilema que acompaña a quienes están movidos por una irrefrenable pulsión de poder, tal como ha señalado Jordi Amat en estas mismas páginas (Quadern, 6 de abril). ¿La ambición está al servicio del país o el país al servicio de la ambición? Airado, el penitente reivindica la ‘valentía de pecar’. Por Cataluña, naturalmente.. Ballarín, con 94 años, fue el primero que salió a defenderle, cuando todo su entorno callaba o tomaba distancias. “No lo abandonaré nunca, ni a las buenas ni a las malas”, escribió, tras declararle como “el mejor presidente que hemos tenido y el mejor político de nuestro siglo”. Con su gesto empezó muy prematuramente una rehabilitación que todavía sigue y que quizás culmina con esta película redentora. Seguir leyendo
Jordi Pujol jamás habría confesado la existencia de una fortuna familiar oculta en un paraíso fiscal de no ser por la ‘Operación Cataluña’, armada desde el gobierno español, y por la inocultable corrupción familiar, en especial de su hijo Jordi. Esta es la tesis implícita en la película Parenostre, el filme de Manuel Huerga con guion de Toni Soler, sobre el episodio en el que el ex presidente catalán destrozó su balance de 23 años de gobierno y su imagen de estadista.Las ficciones narrativas no tienen las mismas obligaciones que los documentales periodísticos o históricos. Es amplio el campo para las licencias que se toma el guionista, algunas muy propias de quien ha dirigido el programa televisivo de humor político de más éxito en Cataluña y otras de su militancia independentista. Es inocultable su propósito redentor de la figura política de Pujol, presentado como víctima de la codicia de sus hijos y de su esposa y a la vez “del Estado enemigo”, el todopoderoso y cruel Leviatán con el que el independentismo tuvo la insensata osadía de enfrentarse.Con todos los focos sobre aquellos días iniciales del procès, la ficción fílmica echa a andar con un punto excesivo de mitografía, notable falta de contexto histórico y un aliento insuficiente si se trataba de convertir la caída del patriarca catalanista en una narración de valor universal. La extraordinaria interpretación del matrimonio Pujol a cargo de Josep Maria Pou y Carme Sansa no basta para salvar la película y hacerla atractiva más allá de las generaciones mayores, que han podido seguir intensamente toda la peripecia pujolista.Dos tensas conversaciones ficticias, una entre Pujol y el rey ya emérito Juan Carlos, y otra entre Josep Pujol Ferrusola y el comisario Villarejo, establecen la vinculación entre el descubrimiento del escándalo y la consulta sobre la independencia, mientras que otro diálogo también ficticio, entre el ex presidente y el rector de Gósol, Josep Maria Ballarín, expone la tragedia moral que atormenta al anciano ex presidente, imbuido de sentido de culpa por su escasa vigilancia como padre sobre las actividades de sus hijos.Esta conversación se presenta como una confesión auténtica, con absolución incluida a cargo del cura, e implícitamente del guionista, previa exploración del dilema que acompaña a quienes están movidos por una irrefrenable pulsión de poder, tal como ha señalado Jordi Amat en estas mismas páginas (Quadern, 6 de abril). ¿La ambición está al servicio del país o el país al servicio de la ambición? Airado, el penitente reivindica la ‘valentía de pecar’. Por Cataluña, naturalmente.Ballarín, con 94 años, fue el primero que salió a defenderle, cuando todo su entorno callaba o tomaba distancias. “No lo abandonaré nunca, ni a las buenas ni a las malas”, escribió, tras declararle como “el mejor presidente que hemos tenido y el mejor político de nuestro siglo”. Con su gesto empezó muy prematuramente una rehabilitación que todavía sigue y que quizás culmina con esta película redentora Seguir leyendo
Opinión. Texto en el que el autor aboga por ideas y saca conclusiones basadas en su interpretación de hechos y datos. Es inocultable su propósito redentor de la figura política de Pujol, presentado como víctima de la codicia de sus hijos y de su esposa. Jordi Pujol conversa con Pere Aragonès, en un acto de Pimec en Barcelona, el pasado mes de enero.Albert Garcia. Jordi Pujol jamás habría confesado la existencia de una fortuna familiar oculta en un paraíso fiscal de no ser por la ‘Operación Cataluña’, armada desde el gobierno español, y por la inocultable corrupción familiar, en especial de su hijo Jordi. Esta es la tesis implícita en la película Parenostre, el filme de Manuel Huerga con guion de Toni Soler, sobre el episodio en el que el ex presidente catalán destrozó su balance de 23 años de gobierno y su imagen de estadista.. Las ficciones narrativas no tienen las mismas obligaciones que los documentales periodísticos o históricos. Es amplio el campo para las licencias que se toma el guionista, algunas muy propias de quien ha dirigido el programa televisivo de humor político de más éxito en Cataluña y otras de su militancia independentista. Es inocultable su propósito redentor de la figura política de Pujol, presentado como víctima de la codicia de sus hijos y de su esposa y a la vez “del Estado enemigo”, el todopoderoso y cruel Leviatán con el que el independentismo tuvo la insensata osadía de enfrentarse.. Con todos los focos sobre aquellos días iniciales del procès, la ficción fílmica echa a andar con un punto excesivo de mitografía, notable falta de contexto histórico y un aliento insuficiente si se trataba de convertir la caída del patriarca catalanista en una narración de valor universal. La extraordinaria interpretación del matrimonio Pujol a cargo de Josep Maria Pou y Carme Sansa no basta para salvar la película y hacerla atractiva más allá de las generaciones mayores, que han podido seguir intensamente toda la peripecia pujolista.. Dos tensas conversaciones ficticias, una entre Pujol y el rey ya emérito Juan Carlos, y otra entre Josep Pujol Ferrusola y el comisario Villarejo, establecen la vinculación entre el descubrimiento del escándalo y la consulta sobre la independencia, mientras que otro diálogo también ficticio, entre el ex presidente y el rector de Gósol, Josep Maria Ballarín, expone la tragedia moral que atormenta al anciano ex presidente, imbuido de sentido de culpa por su escasa vigilancia como padre sobre las actividades de sus hijos.. Esta conversación se presenta como una confesión auténtica, con absolución incluida a cargo del cura, e implícitamente del guionista, previa exploración del dilema que acompaña a quienes están movidos por una irrefrenable pulsión de poder, tal como ha señalado Jordi Amat en estas mismas páginas (Quadern, 6 de abril). ¿La ambición está al servicio del país o el país al servicio de la ambición? Airado, el penitente reivindica la ‘valentía de pecar’. Por Cataluña, naturalmente.. Ballarín, con 94 años, fue el primero que salió a defenderle, cuando todo su entorno callaba o tomaba distancias. “No lo abandonaré nunca, ni a las buenas ni a las malas”, escribió, tras declararle como “el mejor presidente que hemos tenido y el mejor político de nuestro siglo”. Con su gesto empezó muy prematuramente una rehabilitación que todavía sigue y que quizás culmina con esta película redentora. Tu suscripción se está usando en otro dispositivo. ¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?. 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Escribe en EL PAÍS columnas y análisis sobre política, especialmente internacional. Ha escrito, entre otros, ‘El año de la Revolución’ (Taurus), sobre las revueltas árabes, ‘La gran vergüenza. Ascenso y caída del mito de Jordi Pujol’ (Península) y un dietario pandémico y confinado con el título de ‘Les ciutats interiors’ (Galaxia Gutemberg).. Normas ›. Mis comentariosNormas. Rellena tu nombre y apellido para comentarcompletar datos. Please enable JavaScript to view the comments powered by Disqus.. Más información. Archivado En. Cataluña. Jordi Pujol. CDC. Generalitat Cataluña. Cine. Independencia. TV3. Barcelona. Si está interesado en licenciar este contenido, pinche aquí. _. Últimas noticias. 06:0006:0006:0006:00. Lo más visto
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