«¡Feliz asesinato!». En Traitors España si hay que felicitar a alguien se le felicita por matar. Así, tal cual, sin remilgos, sin medias tintas. Hacía mucho tiempo, tal vez demasiado, que en Antena 3 los realities había pasado a mejor vida hasta que apareció Traitors. La primera edición de este programa se emitió en MAX, fue con famosos y lo presentó Sergio Peris-Mencheta. El estilo de Traitors, completamente diferente a lo que en España se considera reality, conquistó a Atresmedia, que decidió fumar la pipa de la paz con los realities. Dejó la esencia del formato, lo hizo para anónimos, puso a Juanra Bonet al frente y, aunque en un primer momento se iba a estrenar en laSexta, se dieron cuenta que el formato era tan, tan, tan diferente que por qué no llevarlo a Antena 3.. Seguir leyendo
Hacía muchos años que Antena 3 no lo pisaba un reali. Anoche se estreno Traitors España, un reality sin serlo; un crimen sin sangre; unos asesinos sin cadáveres, pero con mucha novela negra y con demasiada intensidad
«¡Feliz asesinato!». En Traitors España si hay que felicitar a alguien se le felicita por matar. Así, tal cual, sin remilgos, sin medias tintas. Hacía mucho tiempo, tal vez demasiado, que en Antena 3 los realities había pasado a mejor vida hasta que apareció Traitors. La primera edición de este programa se emitió en MAX, fue con famosos y lo presentó Sergio Peris-Mencheta. El estilo de Traitors, completamente diferente a lo que en España se considera reality, conquistó a Atresmedia, que decidió fumar la pipa de la paz con los realities. Dejó la esencia del formato, lo hizo para anónimos, puso a Juanra Bonet al frente y, aunque en un primer momento se iba a estrenar en laSexta, se dieron cuenta que el formato era tan, tan, tan diferente que por qué no llevarlo a Antena 3.. Anoche llegó el primer episodio, el episodio en el que los concursantes se conocen, se presentan y empiezan a crear sus primeras alianzas. Porque Traitors España es una especie de Cluedo renovado, una novela de Agatha Christie adaptada a un programa de entretenimiento, es una novela negra en tiempo real en la que hay asesinos, asesinados, pero ni una gota de sangres, pues el verdadero crimen es la traición.. Traitors España es el programa perfecto para aquellos que siempre han querido mentir y no se atreven; para aquellos a los que su conciencia no les permite saltarse alguno de los 10 Mandamientos; para aquellos que engañan, traicionan, clavan puñales por la espalda, pero siempre escondidos bajo la máscara de la sonrisa y la dulzura. En Traitors España sólo pueden jugar los que tengan el valor de hacer cualquier cosa para ganar 50.000 euros en plata. Sin embargo, Traitors España es perfecto para el que quiera ver lo peor y lo mejor del ser humano. Anoche se empezó a ver.. ¿Cómo es tener la posibilidad de mentir incluso traicionando a tu propia familia? La sorpresa del arranque de Traitors España no estaba en el parecido más que razonable de Julio, uno de los concursantes, con Juanra Bonet, que anoche se metió hasta a las trancas en el papel de uno de los personajes de Sir Arthur Conan Doyle, sino que entre los participantes hay una madre y una hija, Anuska y Paula. Las dos entraron en Traitors prometiendo nos desvelar su secreto, pero con una promesa más sorprendente aún: si en algún momento se tenían que traicionar entre ellas lo iban a hacer. Anuska, sin embargo, ya en el minuto uno rompió la promesa y desveló a cuatro de sus compañeros el gran secreto, que en el vagón de al lado del tren que les llevaría a su particular Cluedo estaba su hija.. Aunque Anuska y Paula se lo prometieron, Anuska pecó de tonta, de demasiado confiada. Te montas en un tres con tres desconocidos y a la primera de cambio de que te proponen una alianza, llegas y les revelas la mejor carta con la que podía jugar. Y, lo peor, Anuska dice saber mentir y engañar muy bien, pero la que tiene la verdadera capacidad es Paula. Cuando se enteró de que su madre había revelado su secreto no le gustó un pelo. Primer objetivo, conseguir ser una traidora y matar a su madre. Tiempo al tiempo.. Porque Traitors España, aunque complicado en cuanto a realidades humanas -más que las realidades en sí por ser capaz de entender la maldad y la mentira-, es un juego muy sencillo. Hay 18 participantes, un maestro de ceremonias (Juanra Bonet), traidores y fieles, una mesa redonda, un cónclave cada noche, y no del que sale el nuevo Papa, y un asesinato cada día que cometen, precisamente, los traidores. Dicen que los traidores son los que juegan con ventaja porque de ellos depende la partida. Son los encargados de matar y de acabar con el concurso del resto, pero también son los que con más pies de plomo deben andar, porque cualquiera error puede descubrir su verdadero papel. Ir de listo y de sobrado es el mayor error que puede cometer un traidor -como la vida misma-; ir de demasiado comedido, también.. En el estreno de anoche, Juanra Bonet eligió a los dos primeros traidores, Vicky y Carlos. Fue nada más llegar al monasterio donde al entrar la primera frase de los concursantes fue «es de película de terror». No lo dicen por exagerar. Igual que en el Cónclave real, Traitors tiene un mensaje y simbolismo audiovisual desconocido para un reality en una televisión generalista. Desde el lugar elegido, el Monasterio de Piedra, pasando por el juramento de los traidores frente a Juanra Bonet: «¿Prometes mentir y engañar durante tu estancia en este monasterio? ¿Estás dispuesto a asesinar a tus compañeros todas las noches? ¿Te comprometes a mantener tu identidad y la de tus compañeros traidores en secreto?». Hasta la mesa redonda donde los fieles se la tendrán que jugar para salvar sus vidas y descubrir a los traidores. O hasta el cónclave que cada noche celebran los traidores, primero, para elegir a su tercer cómplice -David Popeye, ex boina verde- y, después, para matar.. De momento, en el primer episodio de anoche se libraron del primer crimen por aquello de dar un poco de margen y que se empezasen a conocer. Lo curioso es que Traitors España te envuelve en tal juego de misterio que al final el asesinato es lo de menos, pues caer van a ir cayendo todos. Lo excepcional de Traitors España es ver a concursantes, como Carlos, creador de contenidos de viajes y traidor desde anoche, que se creen los magos y artistas de la mentira y la manipulación caer en la peor de las trampas para uno mismo: la vanidad y el ego. Ir de listo y de sobrado cuando todos los ojos se posan en todos es ser demasiado osado. Carlos lo fue. Menos de 24 horas después de ser elegido, Carlos se convirtió en el blanco de todas las sospechas. ¿Por qué? Porque él mismo se descubrió al querer ir de sobrado. Su ventaja, la alianza con Paula, la cual, aunque asegurase que quería ser fiel, tiene más ganas de ser traidora que Óscar Puente de que todas las líneas ferroviarias funcionen sin fallos, retrasos y cancelaciones.. Paula es más lista que el hambre. Fue la primera en descubrir que Carlos era uno de los traidores. Se calló porque para ella es una ventaja que ya le gustaría tener a muchos. Fue tan lista que sin decir demasiado hizo que fuera el propio Carlos el que se descubriera. Y se lo ganó. Un fiel que tenga el apoyo de los ganadores es el que tiene todas las cartas para ganas.. Le reveló antes del segundo cónclave en el que se descubriría el tercer traidor y se cometería el primer asesinato, que todos sospechaban de él y que en la mesa redonda donde saldría el nombre del primer traidor, los fieles iban a dar el suyo. Carlos, consciente de que su cuello estaba en juego, pues si le descubren, se larga, consiguió de Paula una carta que le daba la posibilidad de intentar enmendar su gran error. Hasta la semana que viene no sabremos si lo conseguirá o si el que se creía ganador de Traitors España será el primero en caer de los traidores.. Y mientras tanto, hay que imaginarse lo que es vivir en un monasterio con 18 desconocidos que te pueden traicionar y acaba contigo en cualquier momento, donde cualquiera puede ser tu enemigo, donde nadie muestra su verdadera cara -la mejor, Lucía, diseñadora de videojuegos, y la primera en engañarles con su profesión y con su vocecilla dulce y su sonrisa de no haber roto un plato en su vida. Cuidado con las mosquitas muertas, son las más peligrosas- y donde se asesinara sin el miedo a que la víctima acabe muerta o corra la sangre. ¿Convertirse en asesino sin que haya asesinato? Como dijo Vicky al pronunciar su juramento: «Asesinaré vilmente».
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