Hace no tanto tiempo, pensar que un reality podía desvelar algo del exterior a algún concursante era inimaginable. Con el paso de las ediciones y del tiempo, esta regla no escrita se fue rompiendo, aunque sólo de poco en poco, de forma sibilina, sin que fuera demasiado descarado. Anoche, Supervivientes se saltó su propia norma desvelando una información innecesaria, pues no es nada realmente grave, y provocando lo que precisamente hace que la norma sea imprescindible: desestabilizar al concursante. ¿Era necesario saltarse la norma? ¿Era necesario contarle a Manuel lo que puede afectarle en Supervivientes? ¿Era necesario contarle una información del exterior que de grave tiene poco, pero que para él puede suponer un duro golpe cuando ya son 61 los días que llevan en Supervivientes? Tal vez, sí lo era, el porqué es el mismo que lleva sobrevolando esta edición de Supervivientes: sólo hay tres concursantes que estén sosteniendo los contenidos y, al final, esto es lo que provoca que Supervivientes se salte sus propias normas.. Seguir leyendo
Hay una norma no escrita que todo reality debe cumplir: no revelar nada del exterior que pueda desestabilizar a quien concursa. Supervivientes se lo ha saltado sin ninguna necesidad con Manuel. O, tal vez, es que sí hay necesidad
Hace no tanto tiempo, pensar que un reality podía desvelar algo del exterior a algún concursante era inimaginable. Con el paso de las ediciones y del tiempo, esta regla no escrita se fue rompiendo, aunque sólo de poco en poco, de forma sibilina, sin que fuera demasiado descarado. Anoche, Supervivientes se saltó su propia norma desvelando una información innecesaria, pues no es nada realmente grave, y provocando lo que precisamente hace que la norma sea imprescindible: desestabilizar al concursante. ¿Era necesario saltarse la norma? ¿Era necesario contarle a Manuel lo que puede afectarle en Supervivientes? ¿Era necesario contarle una información del exterior que de grave tiene poco, pero que para él puede suponer un duro golpe cuando ya son 61 los días que llevan en Supervivientes? Tal vez, sí lo era, el porqué es el mismo que lleva sobrevolando esta edición de Supervivientes: sólo hay tres concursantes que estén sosteniendo los contenidos y, al final, esto es lo que provoca que Supervivientes se salte sus propias normas.. En la historia de Supervivientes han sido contadas las veces que el reality se ha saltado la norma de no contar nada del exterior, precisamente para no desestabilizar ni afectar al concurso de los supervivientes. Una de las veces fue con la pandemia y el resto siempre ha sido con las visitas de familiares o seres queridos de los concursantes a los cayos. Es inevitable que quien visita a los concursantes no se le escape alguna cosa del exterior, aunque lo habitual es un «todo está bien», «ya te enterarás cuando salga» o un «todo el mundo está contigo y estamos súper orgullosos de ti». De hecho, es más habitual ver a los presentadores de Supervivientes pidiendo a los visitantes que no digan nada de fuera, que lo contrario. Hasta anoche.. Anoche, Supervivientes se saltó esta norma y la saltó por los aires, pues no sólo reveló información del exterior que de grave tenía poco -por ejemplo, cuando algún familiar está enfermo o cuando ha pasado algo realmente grave con algún familiar- sino que montó un show específico para ello. El protagonista, Manuel; la mensajera, su hermana; el canal; tres botellas con tres pergaminos; el mensaje, la infidelidad de Gabriella, su pareja, tentadora de La isla de las tentaciones 8, la mujer con la que Montoya fue infiel a Anita después de que ésta le fuera infiel con Manuel y la otra visita del exterior que Manuel recibirá este martes, pero ya sabiendo que hay rumores e informaciones que apuntan a que Gabriella le ha sido infiel. Si encajamos todas las piezas, el puzzle se ve más claro, demasiado claro, e incluso, revelado por el padre de Manuel en plató: «Un trío». No un trío sexual sino el trío, ya cuarteto, que Supervivientes necesitaba para seguir sacando jugo a la historia Manuel, Montoya, Anita y ahora también, Gabriella.. Sí, Manuel recibió la visita de su hermana Gloria, escondida en una parte de los Cayos a la espera de que Manuel llegase. En Cayo Paloma le esperaba Gabriella. Sin embargo, Gabriela no se iba a encontrar con Manuel ni Manuel con ella -esto será el martes en Supervivientes: Tierra de Nadie-, pues Gabriela estaba allí para convertirse en la camarera de la cena especial que Anita y Montoya habían pedido. Gabriella fue la tentadora con la que Montoya cayó en la tentación en La isla de las tentaciones después de que Anita le fuese infiel con Manuel. Después de La isla de las tentaciones, Gabriella y Manuel comenzaron una relación, la cual ha estado siempre en duda, en especial, por parte de la familia de Manuel, que nunca se ha fiado demasiado de Gabriela. Y esto, que son cosas del exterior que siempre se resolvían o se explotaban en plató se ha decidido trasladas a Supervivientes por una cuestión muy sencilla: sin esto, Supervivientes no tiene contenido del que tirar.. Supervivientes sabe que la historia Montoya y Anita se acaba agotando. Supervivientes sabe que la historia Montoya, Anita y Manuel, tras el cambio de equipo y tras haber separado a Montoya y Manuel, también estaba agotada o, más bien, en pausa. Supervivientes sabe cómo exprimir para que salga más jugo: del exterior. Y es lo que hizo, pese a que es una norma, pese a que puede desestabilizar a Manuel y pese a que ya son 61 días los que los supervivientes llevan en el reality y, en especial, Manuel. Manuel ha pasado más de la mitad de Supervivientes en Playa Misterio, sólo, recibiendo la visita de los expulsados, a la espera de convertirse en concursante, en condiciones peores, pues la comida era prácticamente inexistente y la compañía también. Se descubrió el misterio, Manuel pasó a ser concursante oficial y llegaron de nuevo los enfrentamientos con Montoya y Anita. Ahora, con la cosa más calmada, se necesitaba más de esto, Supervivientes necesitaba más de esto. ¿Qué hacer? Desvelar información del exterior que sí, que da mucho juego, pero que para quien la recibe puede suponer un golpe emocional que condiciones su concurso.. Supervivientes reunía primero a Manuel con su hermana Gloria. Ya había advertido Sandra Barneda minutos antes que Gloria iba a dispuesta a desvelar precisamente las infidelidades de las que se ha acusado a Gabriella. Con un Manuel llorando a lágrima viva y su hermana Gloria tranquilizándolo asegurando que «todo estaba bien» por España, Supervivientes descubría la supuesta infidelidad que habría cometido Gabriela de la mano de tres pergaminos y también de su propia hermana, que le ha contado todo con pelos y señales. Descarado.. Manuel procedió a leer los tres pergaminos que había conseguido, uno por uno. «Sale a la luz la información que destrozará a Manuel González cuando salga de Supervivientes y de la que no tiene ni idea», leía Manuel. Así, sin medias tintas, sin preparación, con la emoción por reencontrarse con su hermana a flor de piel. «Salieron unas cosas de que Gabriella estaba liada con gente y saqué un poco de dientes», le contaba Gloria a su hermano, para añadir que»tuvo una discusión con ella».. «Los vídeos que salen son muy distorsionados. Ya sabes tú que la gente es mala, pero cuando tú vuelvas lo verás», subrayaba Gloria. La cara de Manuel era la cara de quien no sabe cómo reaccionar, de quien recibe una información del exterior a la vez que tiene a un ser querido a su lado. «Ha habido turbulencias… ¿tú con ella ya no te llevas? Tú eres mi hermana y yo me fío de ti», decía un Manuel preocupado, pero sin poder reaccionar. El siguiente pergamino concretaba todavía mucho más la información de antes: «Una supuesta infidelidad de Gabriella podría acabar en ruptura con Manuel desde Supervivientes». «Yo, Sandra, estaba súper ilusionado con ella. Es de las pocas parejas por las cuales he sentido algo diferente. Si ha hecho algo tendré que hablar con ella y sentarme con ella… pero me dolería mucho», explicaba Manuel a Sandra Barneda, mientras miraba a su hermana esperando algún tipo de reaccionar que le aclarase algo más, incluso una mirada que le dijera ‘ya sabes cómo es esto’.. Manuel leía el tercer pergamino: «Gloria, la hermana de Manuel y Gabriella, se enfrentarán por la supuesta infidelidad de la extentadora». Gloria le volvía a repetir que se «había peleado» en algunos programas argumentando, de nuevo, que había «sacado la cara por él». Y Manuel esperaba que Gabriella apareciese. Aparecerá, por supuesto que aparecerá, pero no fue anoche. Lo de anoche fue el primer paso, queda el segundo, el reencuentro entre Manuel y Gabriella y, probablemente, un tercero, el enfrentamiento entre palmeras y arena de Gabriella, Gloria y Manuel. ¿Se entiende ahora por qué Supervivientes se ha saltado su propia norma? Una semana entera con contenido nuevo. Sí, siempre de los mismos, pero ¿es que ha posibilidad de sacar de otros?. Aunque todavía quedan muchas semanas de Supervivientes, según van cayendo los concursantes y según van quedando menos, los contenidos se van reduciendo. Si ya estaban reducidos a tres o cuatro concursantes, imaginad a partir de ahora o en el momento que empiecen a caer esos concursantes. Todo tiene una explicación, incluso para que Supervivientes se salte sus normas.. Cierto es que siempre quedarán momentos que ya son un clásico en Supervivientes, como el reparto de recompensas. Anoche, se volvió a vivir uno de esos en los que quedan más que patente el egoísmo y la solidaridad a partes iguales. Nos podemos quejar mucho del show de Montoya, de su intensidad, de que tiene que ser el niño en el bautizo, la novia en la boda y el muerto en el funeral, pero anoche quedó claro que entre tanto espectáculo hay corazón, el que otros no tienen, por ejemplo, Damián.. Hubo Liga de los Dioses, hubo recompensa -una empanada gallega para 20- y hubo el buen corazón de Joshua, ganador de la Liga, el de Montoya, que repartió un mini trozo de empanada con todo su equipo, y el egoísmo de Damián -una vez más-. Joshua se cogió su porción y dejó más de media empanada para el resto. Todos fueron cogiendo su trozo. Nieves, un poco más, al quedar segunda, y luego el resto de su equipo. Y llegó a Damián que se cogió el gran trozo, sin siquiera haber conseguido llegar a la prueba final, dejando al resto con una migaja. ¿Qué provocó esto? Que el Oráculo de Poseidón estallase después y con razón. Se puede ser un crack en supervivencia, pero un cero como persona, y ese es Damián.
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