En España llueve sin parar y en Honduras un fuerte temporal ha obligado a la organización no sólo a evacuar a todos los supervivientes, sino a tomar medidas jamás vividas en Supervivientes. Sin poder realizar conexiones, sin que Laura Madrueño se pudiese desplazar a los Cayos Cochinos, sin los medios necesarios para poder realizar una gala, la organización de Supervivientes, atada de pies y manos, intentó salvar el estreno de Supervivientes: Tierra de Nadie como pudo.. Seguir leyendo
No es la primera vez que las fuertes lluvias hacen su aparición en Supervivientes, pero sí es la primera vez que el reality tuvo que modificar completamente su estructura tras verse obligado a evacuar a todos los concursantes en directo sin posibilidad siquiera de poder conectar con ellos
En España llueve sin parar y en Honduras un fuerte temporal ha obligado a la organización no sólo a evacuar a todos los supervivientes, sino a tomar medidas jamás vividas en Supervivientes. Sin poder realizar conexiones, sin que Laura Madrueño se pudiese desplazar a los Cayos Cochinos, sin los medios necesarios para poder realizar una gala, la organización de Supervivientes, atada de pies y manos, intentó salvar el estreno de Supervivientes: Tierra de Nadie como pudo.. A última hora de la tarde saltaban las alarmas en Telecinco: un fuerte temporal de lluvia y viento estaba azotando Cayos Cochinos. No se sabía si los supervivientes habían sido evacuados o cuál era la situación. Simplemente, unas imágenes de todas las playas inundadas dejaban entrever que se estaban viviendo momentos más que complicados en el reality. Arrancaba entonces la gala con Carlos Sobera y arrancaba con esperanza, aunque ver a Laura Madrueño en el hotel donde se alojan las 200 personas que hacen el programa en Honduras no era un buen augurio.. El estreno de Carlos Sobera al frente de la nueva edición de Supervivientes: Tierra de Nadie no iba a ser fácil. Las extremas tormentas caídas en las últimas horas y que continuaban sin descanso en La Ceiba, localidad donde se encuentra el equipo de Supervivientes, habían provocado una decisión jamás vivida en Supervivientes: Laura Madrueño y el equipo que realiza las galas desde Cayos Cochinos no se podían desplazar allí. El fuerte oleaje, la falta de visibilidad, el viento y la lluvia torrencial no permitían por motivos de seguridad que ni las lanchas salieran al agua para realizar el recorrido desde La Ceiba a Cayos Cochinos, y mucho menos que el helicóptero, segunda opción para desplazarse, despegase. Laura Madrueño, como nunca antes se la ha visto en Supervivientes, intentaba poner un poco de esperanza afirmando que si el temporal amainaba durante la emisión de la gala, ella y el equipo se desplazarían allí.. Sin embargo, según fueron pasando las horas, el temporal fue convirtiéndose cada vez en más virulento. Las olas arrastraban todo a su paso, la lluvia no amainaba y el viento arrastraba palmeras y árboles. Intentando mantener la calma y que el programa se realizara en condiciones, con el salto de Anita y Manuel y su reencuentro con Montoya, Supervivientes tomaba la decisión que les llevaría a cambiar por completo toda la escaleta y estructura del programa para poder seguir emitiendo: las tres playas, Playa Furia, Playa Calma y Playa Misterio, donde se encontraba Montoya completamente solo, tenían que ser evacuadas, pues el agua había sobrepasado los límites para poder permanecer allí.. Un equipo de contingencia, el que siempre permanece en los Cayos, precisamente por si ocurre algún imprevisto como en este caso, consiguió que dos cámaras pudieran emitir en directo cómo se realizó el traslado. Y, aunque no se vivieron momentos como los vividos en otras ediciones con las barcas volcando por el fuerte oleaje, las imágenes en directo de todos los supervivientes trasladados a la playa de juegos, puestos a cubierto bajo una pequeña carpa, con el mar embravecido y sin posibilidad de hablar con ellos, pues el temporal lo impedía, eran la razón de las caras de preocupación y pánico en plató.. Laura Madrueño, durante sus conexiones anoche en Supervivientes.MEDIASE. «Este temporal va de mal en peor, no ha dejado de llover desde la pasada madrugada. Tenemos que decir que la situación es tan límite que tengo que daros una última hora muy importante: en estos momentos comenzamos la evacuación de las tres playas y de los supervivientes. Están cuidados durante toda la evacuación por todo nuestro equipo», comunicaba Laura Madrueño. «Lo que acabamos de ver es impactante, son imágenes muy tremendas», reaccionaba Carlos Sobera desde plató.. Con un esfuerzo brutal, el equipo de Supervivientes en los Cayos conseguía mostrar las impactantes imágenes de la evacuación. «Ese traslado que estáis viendo en barca es de apenas unos minutos y hoy está siendo más largo por el oleaje y las condiciones del tiempo. Estáis viendo cómo se están aproximando a la playa de juegos. Los supervivientes siempre están cuidados, respaldados y con un equipo que trabaja 24 horas con ellos y siempre están acompañados», advertía Laura Madrueño, consciente de que las imágenes no iban a calmar a los familiares presentes en plató ni tampoco a los espectadores.. Pero había más complicaciones. Desde el domingo, Montoya se encontraba solo en la llamada Playa Misterio. Absolutamente ninguno de los concursantes sabe de su existencia, y ese secreto había que mantenerlo como fuese, pues es uno de los contenidos más esperados de estos primeros días en Supervivientes. Sin poder trasladarlo con el resto de sus compañeros para no desvelar el secreto, Montoya era el último en ser evacuado tras una noche de infierno en la que el ex participante de La isla de las tentaciones tuvo que hacer frente él solo a las duras condiciones del temporal.. No fueron fáciles las horas previas a la evacuación para ninguno de los supervivientes. En Playa Calma, Pelayo intentaba construir un dique que les protegiera de la subida del agua y del fuerte oleaje. Efectivamente, lo intentaba, pues la fuerza del mar era imparable. El refugio que se habían construido fue tomado por completo por el agua y durante horas tuvieron que refugiarse bajo un árbol, provocando la angustia de algunos de los participantes, en particular, de Terelu Campos.. La colaboradora de ¡De Viernes! entraba en pánico y se dirigía a los miembros del equipo que se encuentran en la playa grabándoles, advirtiéndoles que a ella había que evacuarla inmediatamente. Sin dudarlo y en medio de la fuerte tormenta, Terelu Campos activó el protocolo de abandono: «Quiero que me saquéis ahora mismo de aquí. Quiero que me pongas en un sitio a refugio ahora mismo. Estoy chorreando. Os lo digo ya, llevadme a la cabaña, donde sea. Yo es que me voy para allá, yo no bromeo. Estoy empapada. Yo me las voy a pirar ahora mismo. Esto es lo que a mí ya me echa de aquí. No puedo con la humedad, no puedo con los huesos».. Muy criticada su actitud en plató por las formas y las exigencias, era su hermana Carmen Borrego la que intentaba defenderla asegurando que su reacción se debía al miedo que estaba pasando. El miedo que estaban pasando todos. Kiko Jiménez, concursante de la edición pasada de Supervivientes, describió entonces que no hay peor situación que la que estaban viviendo en el reality, incluso más que el hambre, pues no solo es el miedo a quedarte atrapado en medio de un extremo temporal sino la imposibilidad de que puedan ser atendidos si ocurre algo. Además, relató, que las evacuaciones nunca son fáciles, pues, aunque los trayectos son cortos, el traslado en barca se hace eterno y con mucho miedo a que la barca vuelque.. En estas condiciones era imposible realizar un programa en condiciones, y mucho menos que se produjera el esperado salto de Anita y Manuel y su reencuentro con Montoya. En un giro de los acontecimientos y ante la imposibilidad de dar el contenido esperado, Supervivientes, producido por Cuarzo, la misma productora de La isla de las tentaciones, decidió rellenar la gala con contenido de los reencuentros de La isla de las tentaciones. Manuel y Anita separados entre ellos y separados de todos se enfrentaron de nuevo a las imágenes de esos reencuentros convirtiendo durante unas horas Supervivientes en La isla de las tentaciones. A grandes males, grandes remedios. Aún así, Laura Madrueño, que ya el año pasado cayó enferma durante Supervivientes All Stars precisamente por un temporal, aguantó junto a buena parte del equipo en la playa del hotel realizando conexiones constantes e intentando poner un poco de orden y concierto a tanto caos.. Fue al final del programa, ya con la noche sobre Honduras y sin que el temporal amainara ni un ápice, cuando Laura Madrueño conectó de nuevo con España para anunciar la decisión de Terelu Campos sobre su abandono. Tras pasar toda la noche pendientes de los supervivientes y de sus evacuaciones, llegaba el momento de conocer qué decisión había tomado finalmente Terelu Campos. Carlos Sobera conectaba de nuevo con Laura Madrueño y esta le anunciaba que ya conocían cuáles eran las intenciones definitivas de la colaboradora.. La presentadora aprovechaba para recalcar cómo se encontraban todos los concursantes y cómo va a desarrollarse el programa hasta el jueves: «Lo primero que quiero que tengáis en cuenta es que los supervivientes, aunque estén evacuados, van a continuar en condiciones difíciles. Vamos a ver cómo evoluciona el temporal y el jueves veremos si han podido volver a sus playas».. Y, tras esta aclaración, Laura Madrueño transmitía por fin la decisión de a hija de María Teresa Campos: «Terelu Campos ha comunicado al equipo del programa que… ¡sigue en la aventura!. Como una jabata, va a continuar con nosotros». Como una jabata, ella y el resto de supervivientes, que jodidos están todos.
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